LOS CUENTOS FOLKLORICOS DE TOMBOLITO

Horacio Cortés Sáb Jun 07, 2008 9:26 pm

Participamos algunos chistes folklóricos, que salen en la sección “A la hora del cierre” del Diario El Tribuno, a los que su creador, “Tombolito” nos tiene diariamente acostumbrados:

Una tucumana dio a luz en la Maternidad.
El médico que la atendió la encuentra hojeando una guía telefónica. Le dice: "No, hija, aquí tenemos un libro con nombres a elegir!".
Ella: "No, doctor, lo que yo busco es un apellido churo..".

Otro:

Una señorita fue herida en un bailongo por otra mujer de una puñalada, como resultado de una disputa por amoríos.
Estando internada, llega un policía a tomarle declaración y le pregunta: Digamé, ¿usted ha sido herida en la reyerta?
No señor policía.
¿Cómo que no? A usted la trajeron al hospital por la herida, ¿no es así?
Si, fui herida, pero no donde usted dice.
¿Y dónde entonces?
Más abajo del ombligo, pero encimita de la reyerta.

Horacio Cortés Dom Jun 08, 2008 7:32 am

Un tucumano invita a su amigo salteño a comer en su casa.
Comiendo estaban cuando llega la Policía y los mete a todos en cana acusándolos robar en una carnicería.
Después que los empujan dentro de una celda, el salteño le reclama a su amigo: ¿Por qué este abuso, caramba, si lo único que estábamos haciendo era comer una cabeza guatiada?
¡Gateada primo, gateada!

Aquí hay otro:

Los santiagueños son conocidos por pronunciar exageradamente las eses.
Por eso, una vez le preguntaron a un mistolero: ¿Cómo se llama usted?
Pintossss, sin la essse.

Horacio Cortés Lun Jun 09, 2008 1:02 am

Dos choros estaban escondidos detrás de un árbol. Esperaban que pase el pagador de una fábrica.
A las dos horas, uno de los ladrones pregunta:
"¿No decías vos que el tipo pasa siempre por aquí?".
El otro: "Hasta ayer pasó siempre, te lo juro. Dios quiera que no le haya ocurrido algo malo hoy".

Otrito por las dudas:

En la casa del tucumano explota la garrafa de gas. Marido y mujer salen por la ventana del dormitorio como escupida i'músico.
Lo auxilian y ella se despierta. Le preguntan cómo se sentía.
Y ella le contesta: "¡Más contenta que los diablos; en veinte años de casados por fin i'salío una noche junto con mi esposo...!"

Horacio Cortés Mar Jun 10, 2008 12:07 am

Harguindeguy y Martínez de Hoz se fueron a cazar al Africa.
Intentaban cazar algo mientras soportaban un calor espantoso, cuando pasan por una laguna, Harguindeguy propone: Nos demos un baño che.
Es que no traje malla.
No importa, nos bañemos desnudos, total ¿quién nos conoce aquí?
Se sacan la ropa y en eso pasa por el camino un ómnibus lleno de turistas argentinos.
Martínez de Hoz avergonzado, se tapa los genitales con las manos, mientras Harguindeguy le sugiere:
No che, mejor tapate las orejas, que por las bolivianas no te va a reconocer nadie!

Otro:

Andaban por la peatonal Alberdi dos buscas vendiendo chucherías. Se encuentran en la esquina de la Urquiza y se saludan:
Que hací Negro, como andai!
¿A qué te tai dedicando ahora!?
Soy representante exclusivo en Salta de una transnacional pionera en tecnología de punta.
Paah, de punta! ¿Eso es cosa seria, no? ¿Tení algo que ver con la informática, la robótica y la cibernética?
No, vendo agujas.

Horacio Cortés Jue Jun 12, 2008 6:15 am

Va un cuento:

Estaban operando a un paciente cuando uno de los cirujanos pega el grito:
¡Paren todo che, hay un rechazo!
¿El paciente rechaza los injertos?
¡Peor, el banco rechazó su cheque!

…………

Entra un turco joven a la farmacia y pide 50 bolitas de naftalina. Le venden y se va.
Al otro día pide otras 50. El farmacéutico pregunta: "¿Para qué necesitas tantas, paisano?, si con 10 o 15 sobra para combatir las poliyas".
El turquito: "¡Para usté, que tene puntería...!".

Horacio Cortés Sáb Jun 14, 2008 10:13 am

Del Diccionario del chiflado

Extracción: dolorosa suma de dinero que nos extrae el dentista por sacarnos una muela sin dolor.
Supositorio: humillación a la que es sometido el recto cuando persiste en fruncir la boca.
Uñas: único recurso conocido para aliviar la sarna.
Honrado: personaje mitológico al que se atribuyen virtudes hoy desaparecidas.
Ajedrez: juego desesperante para el rey, que es el único que no puede comerse a la reina.

Horacio Cortés Sáb Jun 14, 2008 10:14 am

Una jovencita llega corriendo muy agitada a la comisaría del pueblo y le dice a un oficial:
Ay señor…!, qué cosa, al pasar por el arroyo vi el cadáver de una persona completamente desnuda…!
¿Varón o mujer?
No sé señor.
¿Cómo que no sabe…? ¿No conoce la diferencia entre un hombre y una mujer…?
Sí, pero parece que los perros se habían comido la diferencia…

Otro:

Un matrimonio de chaqueños llega de visita a Salta y en la peatonal Alberdi el marido pierde a su mujer en medio del gentío. La busca un rato largo poniéndose cada vez más nervioso, hasta que al final encuentra a un cana y le dice:
¡Agente, i perdío a mi mujer! ¡Hagamé la gauchada, ayudemé a buscarla!
¿Y cómo es ella?
Es bajita, medio fiera de cara, un poco renga, muy chicata y usa unos lentes gruesos y medio verdosos, como traste i botella.
El cana mira al tipo fijamente un momento y le dice:
Seré curioso... ¿para qué la busca?

Horacio Cortés Lun Jun 16, 2008 12:25 am

Llega un santiagueño a una obra en construcción y le pregunta al capataz:
¿No tendría trabajo para un pobre hombre?
Sí, justo ando necesitando a alguien para que acarree los ladrillos.
Ajá, bueno, vuelvo enseguida trayendolé un tucumano que me ha comentao que necesita laburar.

Aquí hay otro:

El santiagueño trabajaba en la pompa fúnebre. Se muere un tucumano y tiene que atenderlo al finao.
Se le acerca la viuda y le pide:
"¡Por favor no vaya a dejar de ponerle la camiseta; mi Leocadio la usaba siempre!".
El mistolero: "Pa lo que va a sudar de ahora en adelante..."!.

Horacio Cortés Mar Jun 17, 2008 7:25 am

El jujeño le dice al médico:
"Doctor, todo el día ando con la cara congestionada, me duele el cuello y a cada rato me falta la respiración".
El médico le toma el pulso y le dice: "Ya está, ¿se siente mejor?".
El jujeño: "Al pelo, doctor, ¿qué hizo?".
Le informa: "Le desabroché el cueyo de la camisa...!".

Va más:

Dos tucumanos salen a bailar en el barrio. Y cuando llega uno le comenta:
"Primo, ¿te has fijao en el anillo de oro que tiene la chica que baila conmigo?".
El tucu le dice: "¡No, a ver mostrámelo...!".

Y una copla:

“Los ojos de una morocha
me han quemao el corazón;
si no dejan de mirarme
me volverán chicharrón".

Horacio Cortés Jue Jun 19, 2008 6:11 am

Un tucumano le comenta a un santiagueño:
"Primo, anoche lo desoyaron al Leocadio".
"Pobre, como habra sufrido…".
"Y sí, alguito sigue sufriendo. Le robaron todas las ollas y ahora almuerza con jarro".

Otro:

La santiagueña va a ver un curandero. Y pide un remedio para curarlo a su marido de su enfermedad. El brujo prepara un atado de yuyos y le dice:
"Hagaló hervir y déle cada tres horas".
"Lo curará, don Anselmo…?, mire que mi esposo está agonizando".
En el acto prepara otro atao de yuyos y se lo entrega. Ella pregunta:
"Pa' mi marido…?".
El sacha médico le contesta: "No, pa' usted y su familia, es buenísimo para la resignación".

Horacio Cortés Vie Jun 20, 2008 6:58 am

La viuda lloraba cuando se llevaban el cajón del finado al cementerio. Y decía:
"Pobrecito, se lo llevan a un oscuro, frío, húmedo, con bichos...!"
Y una salteña lo codea a su marido y le comenta:
"Viejo, a éste lo llevan a la casa de nosotros...!".

Una copla:

"La que me quiera querer
hay de ser rica y buenamoza,
porque no vale la pena
cargar con cualquier cosa".

Horacio Cortés Sáb Jun 21, 2008 11:26 am

El salteño quería divorciarse y le decía al Juez:
"Usía, quiero separarme porque mi mujer si no le pago no se dejaba besar!".
El Juez: "Eso no es causal de divorcio".
El salteño: "Y… bueno, entonces que me fíe igual que cuando éramos novios…!".

Mas:

Lo atropellan a un tucumano. Y muere. Le encargan a un santiagueño avisarle a la viuda. Llega a la casa y pregunta:
"¿Está la viuda de Leocadio Contreras?".
La señora contesta: "Yo soy la esposa de Leocadio, no la viuda".
El mistolero: "¿Cuánto quiere jugar que es la viuda?".

Y esta es la yapa:

Del Diccionario del Chiflado:
Higiene: desaseo que algunos ignoran se puede perder por medio del agua.
Mujer: estimulante erótico que conduce fatalmente a la adicción.
Clavo: pieza de metal indispensable para aplastarse los dedos con el martillo.
Desastre: situación que siempre se produce cuando todo estaba de lo más bien.
Jerigonza: dialecto empleado por los economistas para explicarnos de modo incomprensible leyes económicas que ni ellos entienden y que jamás se cumplen.
Maestra: señorita que durante nuestra niñez nos mostró los primeros muslos femeninos.
Manso: perro que sólo muerde cuando uno le acaricia la cabeza.
Piara: alumnos de primer año de cualquier disciplina o escuela.
Pedante: sujeto que emite sus gases con altanería.

Horacio Cortés Miér Jun 25, 2008 12:05 am

Cuenta Tombolito:
Un amigo mío es muy ocurrente. Tiene cada salida, vea. Me prohibió que lo nombrara. Y bueno yo respeto el nombre.
Le cuento una ocurrencia de él. Estaba en una esquina y pasa una niña por demás linda. Y él la piropea:
"¡Adiós preciosa; ni un capuyo de rosas tiene tanta belleza!".
Ella se da vuelta y le dice: "¡Lástima que yo no pueda decir lo mismo de usted".
Mi amigo le retrucó: "¿Y bueno, su puede mandesé una mentirita como yo...!".

Otro:

Entra un diarero a un boliche y un cordobés con una tornatranca de novela, le pregunta: Che Negro, ¿tení el Clarín?
Sí señor.
Bueno, tocate alguito de jazz, ¿querí?

El mismo cordobés curdela del cuento anterior, seguía chupando un día después en aquel boliche cuando entra de nuevo el diarero. Y el curda le pregunta:
Che Negro, ¿tení la Razón?
Como no hay ningún instrumento llamado razón, el diarero le contesta:
Sí señor.
Bueno Negro, ¿pa qué vamo a discutí entonce?

Horacio Cortés Jue Jun 26, 2008 6:51 am

Le decía una mujer a otra:
¡Ay Caro, estás reflaca! ¿Como hacés?
Hago la dieta religiosa...
¿Cómo es...?
Te subís a la balanza, mirás cuanto kilos pesás, gritás ¡Dios mío! y no comés nada durante una semana.

Y más:

Entra un borracho a un almacén:
¡Oiga patrón, deme veinte litros de tinto.
¿Trajo los envases?
Con él está usted hablando…

Horacio Cortés Mar Jul 01, 2008 12:07 am

Un tucumano iba con un loro al hombro. Lo ve pasar un santiagueño y pregunta:
"¿Dónde vas con ese gato…?".
El Tucu: "No seas zonzo, primo, ¿no ves que es un loro?".
El de Santiago: "Usted se caya, yo le pregunto al loro...!".

Más:

Suena el teléfono en la fábrica y una mujer avisa:
"Mi esposo no va a ir a trabajar hoy!".
Preguntan: "¿Qué le pasa?".
Responde: "Está atorao".
Vuelven a preguntar: "¿Qué es eso…?".
Le aclara: "Anoche se tomó cinco boteyas de Toro al hilo...".

Y más:

¿Cómo se llama su finca?
Se llama XO Doble V Screen Ranch Pondeross Corner Inn WPYW Cash Road.
¿Y tiene mucho ganado?
Debía tener, pero cada vez que me acerco con los hierros de marcar, las vacas huyen desesperadas.

DEL DICCIONARIO DEL CHIFLADO

Ponzoña: condimento con que las mujeres le dan sabor a la conversación cuando hablan de sus amigas.
Masa: materia prima donde el político se gana el pan con el sudor de la gente.
Muerta: mujer que dejó de hablar por teléfono para siempre.
Mago: empleado que se las arregla para mantener a su familia todo el mes.
Padrino: seudónimo que usa el padre de la criatura para estar presente en el bautismo.
Santa: mujer que vive rezando para que el marido reviente de una buena vez.
Tío: proveedor indispensable de primas para contribuir al desarrollo sexual de sus sobrinos.
Alma: especie de cuesco espiritual que se desinfla cuando el dueño muere.
Bufón: payaso intocable porque es amigo del que manda, quien además es el único que festeja sus estupideces.

Horacio Cortés Miér Jul 02, 2008 5:40 pm

Dos tucumanos entran al restaurante y piden milanesa.
Al ratito escuchan golpes que venían de la cocina y uno se apura a decirle al mozo:
"Primo, decile al cocinero que a la mía no le pegue, que la rete nomás…!".

Otro:

Una mujer le pide a un abogado que demande a su marido por locro cesante.
El abogado la corrige y le dice: "Será lucro cesante, no locro cesante".
La mujer aclara:
"Lo que pasa es que ese infeliz se chupa todo el sueldo y nos mata de hambre a la familia".

Y esto:

Las autoridades dieron a conocer los resultados del último censo de Santiago del Estero. Hay 725.000 guitarras, 1.322.287 bombos, 940.327 cajas chirleras y un arado.

Horacio Cortés Jue Jul 03, 2008 6:27 pm

Del diccionario del chiflado:

Paternidad: misterio que las mujeres se llevan generalmente a la tumba.
Sartén: artefacto donde nuestras esposas fríen nuestras ganas de comer.
Tétano: congestión ocular de los hombres causada por corpiños muy ajustados.
Puntual: salame que nunca aprenderá a llegar tarde como todo el mundo.
Universitario: ciudadano con ideas propias que paga los estudios con plata de su padre.
Piedra: parte del cerebro ajeno donde se estrellan nuestras más brillantes ideas.
Seducción: arreglo entre un tipo y una tipa para acostarse por las buenas.
Retrete: rincón de la casa donde las tripas aprenden a tocar trombón.
Bardo: poeta que en el medievo se moría de hambre, no como ahora, que también.
Cáscara: parte de los huevos que se rompen en cuanto uno sale del supermercado.
Historia: historieta cómica de la cual es de mal gusto reirse.
Idolo: en los pueblos atrasados era Dios; en los civilizados de hoy es un energúmeno que toca la guitarra como la mona mientras las espectadoras se desmelenan y profieren alaridos.
Escote: parte del vestido femenino que nos hace olvidar lo que estábamos diciendo.
Crisis: ataque nervioso donde el marido siempre resulta culpable de la menopausia de su esposa.

Horacio Cortés Dom Jul 06, 2008 9:57 am

Explicaba un funcionario que gracias a las nuevas reivindicaciones sindicales, en adelante sólo se trabajaría los lunes.
Y un santigueño pregunta:
¿Todos los lunes..? ¿ninguno cae en feriado…?

Más:

Decía un tipo: ¡Mi mujer ya me tiene harto!
¿Y por qué che?
¡Porque todas las noches anda de boliche en boliche!
Ah, caramba, que desgracia, te compadezco, ¿se le dió por la bebida?
No pues, anda buscándome a mí.

Otro:

Un marido santiagueño sale de farra con sus amigos y vuelve dos días después hasta el sorongo. Cuando estaba a punto de entrar en su casa dispuesto a aguantar que su mujer lo asesinase, se le ocurrió la idea salvadora. Fue hasta la cabina telefónica más cercana y llamó a su esposa:
¡María, María, soy yo! ¡Me he escapado! ¡No pagues el rescate, no pagues el rescate!

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